Sobredosis

Hartazgo, saciedad, atiborramiento, congestión, impregnación… Todos estos términos es lo que sale en Google cuando meto sinónimos de saturación. Y esa es mi sensación en este momento.

En tiempos de confinamiento teníamos tiempo y nos concienciamos de la necesidad de formarnos, de desarrollarnos, de potenciarnos… Y nos metimos a tope en formaciones online , en webinars…Nos conectábamos, leíamos más (no mejor)… Y daba la sensación que nos retroalimentábamos constantemente con tanto “nuevo” descubrimiento. Parecía que habíamos descubierto El Dorado y que necesitábamos secarlo y sobre todo mostrarlo a los demás. Nuevos temas, nuevos paradigmas a explotar.

Y en mi caso todo me ha saturado, me ha explotado y logrado que la apatía supere a las ganas de continuar y que tenga más ganas de parar que de continuar metido en esa rueda que me abstrae por completo de la realidad que vivo en mi día a día. Mezcla de cansancio, de apatía, de ruina…

Todo esto se ha salido de madre (y entono el mea culpa) con tanto nuevo concepto y tanta novedad que por cierto, siempre existió.

Nuevos objetivos, nuevos paradigmas, nuevos retos que sin una previa reflexión no sabemos en la mayoría de los casos a dónde nos llevan.

Que si transformación digital, que si habilidades blandas, marca personal, más liderazgo, potenciar la inteligencia emocional, aprender y desaprender, estrategia holística, preguntas poderosas para autoconocerme y sacar lo mejor de mi mismo… No es que no esté de acuerdo con estos temas, es más algunos me parecen muy necesarios, sino que de tanto uso fuera de contexto corren el riesgo de perder su significado y su objetivo real. Y contextualizando, veo que todo el mundo te habla de esto como grandes expertos  (al final del post te van unos links con, en mi opinión,  auténticos referentes de estos temas) Todo vale, todo cuenta y todos esperan conseguir su trozo de la tarta.

Por otro lado, estamos en vía de quemar la información buena y de valor por esta sobredosis informativa que hace que el contenido de calidad quede difuminado entre tanto humo. Saturación por la gran cantidad de webinars, de desayunos online, de reuniones con el experto, de información redundante sobre estos temas en rrss… Moriremos de éxito…o de sobredosis.

En mi opinión se necesita más sensatez, más racionalidad, más sentido común. La línea es muy fina y en el equilibrio está la virtud… Ni tanto ni tan poco.

Un poco de reflexión y de autocrítica no estaría mal. Reflexionar y pensar más, pero pensar para actuar, para hacer y no quedarse en una mera declaración de intenciones  (Cuando el sobre análisis se vuelve inacción (danalanda.com)*

Puede ser que hayamos perdido el norte, si es que alguna vez lo tuvimos.

Y sobre todo pensando que nos hemos dejado lo importante, a las personas, la clave de todo este sinfín de piezas, por tratar de surfear la ola y estar a la última. O nos focalizamos de verdad en ellas o esto no tendrá vuelta de hoja.

Nos hemos ido a la forma más que al fondo, por cierto dos cosas que tienen que ir de la mano y en sintonía,  y parece que hemos empezado la casa por el tejado. O nos replanteamos lo imprescindible  y lo realmente importante o seguiremos dándole vueltas tratando de cuadrar el círculo.

Para otro día dejo el uso de términos anglosajones en nuestro día a día, de verdad merece un solo post sobre eso (Mañana tengo un call para preparar un meeting con unos customers) De verdad que es para hacérnoslo mirar, teniendo a Cervantes o a Machado y nos vamos con palabrería “cool”.

“En la simplicidad está la máxima sofisticación” (Leonardo Da Vinci)

Aquí os dejo los links de auténticos expertos sobre los temas que van expuestos en el post (y no tanto gurú que ha surgido en estos tiempos)

Liderazgo y Estrategia: Jonathan Escobar,  Francisco Alcaide, Juan Carlos Cubeiro, Xavier Marcet, y  Miquel Lladó

Marca Personal: Guillem Recolons, Eva Collado Durán, Andrés Pérez Ortega y Pablo Adán Micó.

Coaching: Joan ClotetAlfonso AlcántaraJavier Salvat, Elena Arnáiz y Jéssica Buelga

Aprendizaje y Desarrollo Personal: David Barreda, Marta Romo, Marta Grañó y Humannova (Virgino Gallardo, Marc Vigilante y Alicia Pomares)

Comunicación: Elia Guardiola

*Cuando el sobre análisis se vuelve inacción (danalanda.com) 

Fotos: Canvas y Google

Música: Reconstrucción, Xoel López

Xoel López – Reconstrucción (Deluxe 12 años después) – YouTube

 

«Incertidumbre… lo único cierto es lo incierto” by @maider__alonso

 

Diciembre. Las mañanas, con cada amanecer, son la antesala a un día aún por vivir. Esa mezcla de sol y luna tras la ventana.

Ese silencio que aún reina en el mundo donde la luz acaricia las sombras y la vida empieza a crearse lentamente. Donde la vida se hace presente sin remedio en ese placer consentido que seguro esconde una oportunidad en el fondo de una taza.

Leo con el primer sorbo de un café ya frío, “ lo único cierto es lo incierto.”

Incertidumbre. Qué difícil palabra en los tiempos que corren. Y no sé si este año que se va, tan lleno de grises, de muchas tristes certezas, de también certeras alegrias, nos deja o no oportunidades a su paso, y menos aún en el fondo de una taza, como si la vida fuera una posibilidad, una nueva oportunidad. ¿Lo es?

La verdad es que no sé si me gusta incluso la palabra oportunidad cuando muchos la han perdido. La vida, digo. Así que quizá, la palabra, como este café de hoy, sepa más a esperanza que a otra cosa, a bonita posibilidad . Por eso de que nunca hay que perderla, por eso de que siempre hay que buscarla. Por eso de que el mundo necesita más que nunca de su palabra, aferrarse a la vida como si no hubiera un mañana.

Hoy pensaba en cómo han sido estos meses atrás, en cómo hemos cambiado, en lo que nos hemos convertido, en lo que hemos perdido, en lo que hemos aprendido, lo que hemos vencido, lo que hemos recibido, lo que hemos conocido.

Quizá por eso, querido miedo, te miro y pienso, te siento y deseo, que todo lo que eres tiene más de pasado que de futuro. Hueles a zarpazo inesperado si, a suelo desvaneciéndose bajo nuestros pies, a noches sin luna, a llanto en silencio pero también y por qué no, a risa fértil.

 

 

Así es como llegamos al mundo, con la piel muy suave y un ruido intenso esperándonos afuera, arañándonos las entrañas desde que respiramos por vez primera, temblorosos y frágiles hasta sentir el calor tras la caricia , hasta sentir y abrazar piel con piel, ternura con instinto, el amor.

Nadie nos enseña a doler, ni mucho menos a qué hacer con ese dolor, y es por eso que no es tan extraño que un día sientas que no haya ya más piel que te sujete, que te calme, que te cobije. Pero créeme, no pasa nada. Todo gira sin descanso y te invita una y otra vez a sentirte mal por no poder sentirte mejor, cuando en verdad y permíteme decirte, no pasa nada.

 

callas…

(Escucho tu silencio.

                    Oigo

constelaciones: existes.

                        Creo en ti.

                                    Eres.

                                          Me basta)

Ángel González

(Fragmento de poema, Me basta así “)

 

Aprendemos a vivir como a caminar, a base de caer y levantar, de hacerlo cada vez mejor, de frente y por instinto, y olvidamos con la misma facilidad que somos todo eso y mucho más: Arañazos. Añicos. Espinas. Cristales. Ceniza. Polvo.

Todo eso y mucho más. Miedo. Incertidumbre. Dolor. Porque somos piel, emociones y  también canciones, porque a través de cada grieta que se abre hoy en tu pecho hay una oportunidad de luz,

y siempre, créeme, unos ojos que te miran.

Esperanza, es esa palabra que dulcemente se deshace en tu boca , cuando ríes, cuando abrazas aunque sea en la distancia , cuando lloras, cuando miras de frente la vida, cuando dueles, supuras y a la vez, curas.  Sencillamente, cuando eres.

Tenemos miedo, si, y no pasa nada. Lo demás, todo lo demás, son ganas. Y con eso, como diría Ángel González en su poema, con eso basta.

Fotos: Maider Alonso

Coldplay , Fix you

(6) Coldplay – Fix You (Official Video) – YouTube

PEP (y no va de Guardiola)

 

 

Parece que el post que voy a compartir tiene relación con el fútbol por el título o si veis la otra foto con un título de serie de Amazon o Netflix, pero nada más lejano de la realidad. Hoy quiero tratar un tema por el que la mayoría de las personas hemos pasado y pasaremos… Esos momentos en los que nos metemos en una espiral por nuestros pensamientos, por presentimientos o simplemente por cosas que notamos, a las que damos una relevancia mayor de la que realmente se merecen.

He pasado por estos momentos y si no lo reconociese mentiría, y la conclusión que he sacado es que nosotros mismos alimentamos esta percepción y echamos gasolina al fuego, cuando para nada tiene que ver con la realidad. Cada vez tengo más claro que los conflictos son buenos y nos hacen crecer.

Este post es una opinión personal a compartir, no soy un experto en psicología y solo trato de compartir mis experiencias. Pero me voy a explicar.

En ocasiones esta situación nos pasa por no afrontar los conflictos y pretender que desaparezcan solos. Craso error, los conflictos hay que afrontarlos y acostumbrarnos a vivir con ellos. Todo en la vida son conflictos, decisiones, dudas… y nuestra actitud es la que marca el desarrollo de los mismos. Hacerles frente, dialogar, escuchar… En la mayoría de casos una simple conversación evita bucles y enfrentarse a estos conflictos evita malentendidos y pérdidas de tiempo.

En el tema de los conflictos y la interpretación que les demos tenemos tres aspectos fundamentales (opinión personal) que nos pueden cambiar la forma de verlos. Es lo que yo llamo el PEP (y no va por Guardiola), y son las percepciones, las expectativas y la perspectiva. Voy a explicar un poco cómo esta forma de ver y mirar la realidad puede cambiar la forma de afrontar estos problemas (a mi me ha ayudado).

Las percepciones hacen que la forma en la que nos llega una situación o una actuación determinada nos pueda afectar de una forma u otra. Las percepciones que tenemos muchas veces pueden venir sesgadas y ese sesgo influye en la forma en la que percibimos las cosas y hace que veamos negro lo que no es ni gris… Ver las cosas y percibirlas con estos sesgos, muchas veces determina nuestra actitud hacia las mismas. (Al respecto muy recomendable el último post de Guillem Recolons) Y pongamos ejemplos como  cuando nos hablan de una persona o de una cosa de una forma predeterminada y hace que la veamos y percibamos ya con otros ojos… Importante ver todo de una «forma limpia», las percepciones pueden tergiversar mucho la realidad y cambiar nuestra forma de actuar.

Una forma de minimizar estas percepciones es no prejuzgar, no sacar conclusiones por adelantado y sobre todo, en cuanto a las personas y sus comportamientos, tener empatía con ellas, no todos estamos siempre alegres ni bromeando, pero tampoco llorando.

Fotos de stock gratuitas de adentro, agujero, albañilería

Por otro lado son muy importantes las expectativas que tenemos de las situaciones que ocurren a nuestro alrededor, ya sean estas por actuaciones provocadas por personas o por hechos concretos no relacionados con esas personas. En mi caso, en general tengo unas expectativas muy bajas (excepto de mi familia más cercana), eso ha hecho que cambien no solo mi felicidad sino también mis percepciones. Si no tengo grandes  expectativas con respecto a algo/alguien y el resultado es bueno, la alegría está fuera de toda duda, por el contrario si tengo expectativas altas y en la mayoría de los casos no son lo esperado la decepción se cumple. No tener grandes expectativas me ha hecho crecer, incluso cuando estas expectativas son el resultado de mis propias decisiones.

Además, actualmente por la competitividad en la que nos movemos, tenemos la necesidad de ser aprobados por los demás (expectativas), de la constante palmada en la espalda (más expectativas) y al final esto es un gran error. Lo dijo Djokovic este domingo tras perder de nuevo con Nadal en Roland Garros «Es imposible gustar a todo el mundo, solo intento ser buena persona».

Hacer las cosas bien y de forma correcta tiene que ser nuestro objetivo. (Francisco Alcaide «Fast Good Management»)

Y por último está la perspectiva. Poner distancia voluntariamente me ha hecho afrontar de una manera diferente los conflictos. Estos siguen existiendo, pero la visión y el foco que pongo en los mismos cambia de una manera considerable. Hay veces que los mismos sesgos de los que he hablado antes hacen que nuestra perspectiva cambie. Tomar altura y distancia hace ver las cosas de una forma diferente. Estar enrocado, afrontar sin pensar… hace que no veas todas las opciones de solución del conflicto e incluso que agrandes una situación que fácilmente es minimizable.

Al final todo depende de los ojos que pongamos y a veces un paso atrás son dos pasos adelante.

«No se aprende a fracasar, se aprende a superar el fracaso» (@yoriento)

Fotos: Martin Rickett y Pexels.com

Bunbury, La actitud correcta

Vigorexia digital

Vigorexia digital

«Otro más, otro que viene a darnos lecciones de cómo sacar partido a la digitalidad y de tener que usar las redes sociales…»

Esta es la sensación que podemos tener continuamente desde el confinamiento y lo que puedes entender al leer estas primeras líneas y precisamente se trata de lo contrario.

Tras el confinamiento estamos saturados de personas que nos dicen por todas las vías como sacar partido a herramientas digitales, como conectar con nuestros clientes, como aportarles valor, como enviarles información para nosotros relevante… en definitiva como ser expertos digitales en 4 horas!!! Eureka… mando mails, escribo whattsapp, tuiteo, cuelgo en LinkedIn, Facebook… sin control, siempre la misma información, a la misma hora, sin estrategia clara y sobre todo bombardeando a mis clientes… suelto todo el aire que llevo dentro y ya…a respirar de nuevo hasta el día siguiente.

Esta forma de actuar la sufrimos a diario. Solo tenemos que abrir nuestra correo y ver la cantidad de información de webinars, de charlas y de cursos online que nos ofrecen. Basta con entrar en una web de cualquier temática para que los algoritmos nos empiecen a saturar con información irrelevante, que te metas en una webinar concreta y ya te empiecen a entrar mails de cursos irrelevantes para ti (me han llegado a mandar un curso de cómo bajar 5 kilos en 7 días y que yo lo cuente… voy a tener que cambiar la foto de mis perfiles)

 

Toda esta introducción viene al caso de la obsesión que tenemos estos meses de dar al click y enviar, enviar, enviar… Muchas veces la información que mandamos es potente y por tener saturados a nuestros clientes se va directamente a la bandeja de spam o a la papelera… una pena. Esa maldita obsesión por compartir y soltar información sin saber realmente para qué sirve o si le es útil a alguien.

 

La clave es conectar, personalizar,  transmitir y después de todo crear una necesidad a nuestra comunidad. Para eso tener una estrategia digital es fundamental. Saber qué quiero conseguir, por qué lo quiero, para qué lo quiero, con quién lo quiero conseguir y cómo lo quiero lograr (medir los KPI´s y ver el retorno de mi actividad). ¿Nos hemos hecho estas preguntas antes de empezar a hacer? Sobre todo, porque si no nos hacemos estas preguntas, renunciamos al aprendizaje que nos puede dar nuestra vigorexia digital, nuestra ansia de clickear…

 

Una de las cosas que tenemos que hacer antes de dirigir un mensaje a alguien es ponernos en su lugar y saber si necesita lo que le vamos a ofrecer, si le aporta valor y si este valor es diferencial (Guillem Recolons)

 

Además es importante conectar con los clientes desde la empatía. No sabemos en muchos casos como están, como les ha ido este tiempo, como han estado y como han llevado el confinamiento… Antes de todo tenemos que pensar que nuestra relación personal puede haber cambiado, que haya recelos, que no sepamos muy bien como acercarnos de nuevo a estos clientes. Habrá clientes con una relación ya personal con los que será más fácil, pero también hay otros no tan afines y a estas personas ahora más que nunca saturarles es perderles.

 

Sin valores personales no vamos a ningún sitio. La buena comunicación, la solidaridad y la gratitud son valores ahora a tener muy en cuenta y sobre todo el ponernos en el lugar de la otra persona. Ser persona es ahora fundamental… Por favor no actuemos como bots.

Mente, La Paz, Paz De La Mente, Unidad

Por otro lado personalizar la información es la llave del mensaje. Poder crear y dar forma a la  información a compartir es lo que realmente nos va a diferenciar. Esta customización del mensaje lleva tiempo, lo fácil es buzonear y continuar siendo vigoréxicos digitales. ¿Pero nos hemos preguntado qué le interesa a nuestra comunidad o qué tipo de información le aporta valor a nuestros clientes? Tocar el intro y saturar es lo más fácil y encima, cumplimos…

 

Una aproximación correcta (son solo unas palabras), personalizar con el nombre del receptor, con un ¿cómo estás?, ¿qué te pareció la última información que compartí?… y con una pequeña descripción del aporte de valor que le estás compartiendo de nuevo. A todos nos gusta que cuando nos envían algo nos pregunten por las últimas novedades, haya una introducción correcta… que levante la mano el que no ha recibido una invitación en LinkedIn y según aceptas te venden cursos de astronauta para llegar en 3 horas a Urano. Seamos serios, personalizando y con valores ganamos en 2 minutos lo que puedes perder en 3 segundos por un resbalón («Elena Arnaiz dixit»)

 

La forma en la que comunicamos es la que de verdad hace que transmitamos o que nos espamicemos… pensad cuantos mails ni recibís ni os dais cuenta que habéis recibido con información relevante porque en su momento los categorizasteis como spam… !!!Cuánta información perdida!!! !!!Cuánto valor al garete por una mala estrategia de comunicación!!! Esta es la importancia de no caer en los errores que otros cometen con nosotros. No hagas a los demás lo que no quieras para ti. Se trata de ver cómo facilitamos la vida a nuestra gente y de ver cómo podemos aportarles valor (David Barreda)

 

Si creamos valor y lo compartimos vamos a generar una conexión con nuestros clientes y esto es lo que nos va a posicionar en la mente de ellos haciendo que seamos una opción clara en sus necesidades en momentos determinados. Esta en nuestra mano ser los que de verdad aportan valor a los clientes. No seamos bots semiprogramados, escuchemos y pensemos para actuar, no para responder. Al respecto os recomiendo la lectura de Jordi Collell, «Las oportunidades no aparecen, se crean».

 

Tenemos mucho que aportar en estos tiempos, mucho que dar a nuestros clientes, tesoros que compartir si los manejamos bien. La clave es compartir, no competir. Más vale poco y bueno, que salir en las estadísticas por quedar bien. Ante la vigorexia digital, reflexión y acción.

¿Pensamos?

Fotos Pixabay

Vídeo: The Buggles, Video Killed the radio star

Lo que he aprendido en el confinamiento

 

 

«Lo que he aprendido en el confinamiento»

Después de casi dos años sin publicar nada retomo el blog. La verdad es que no he dejado de escribir, pero por otras circunstancias decidí no compartirlo (falta de ganas, falta de tiempo para tunearlo o un mix de ambos).

Comparto este post, desde la oportunidad que me supone poder compartir todo lo «positivo» que he sacado de este tiempo de reclusión (a día de hoy por aquí seguimos en fase 1). Van ya más de dos meses en esta situación extraña, con sentimientos chocantes e insólitos, por lo novedoso de la situación, de desconocimiento, de intriga, de infoxicación…

Pensaba cómo iba a acoplarme a este panorama tan complejo, si duraría mucho, cómo saldríamos cuando todo volviese a la normalidad… Tanto tiempo para pensar y reflexionar hace que, a veces,  des demasiadas vueltas a asuntos que no están en tu mano o que no sabes ni puedes responder(te)… Preguntas sin respuesta, momentos en los que los planes no dependen de ti, pero tienes que planificar(te)…

Lo mejor de todo este tiempo han sido los aprendizajes que he sacado. En cuanto a las personas, a los comportamientos, al autoconocimiento… Y saco palabras que pueden resumir todo, verbos transitivos de actividad y resultado, de acción (aunque sea estática) Comienzo el desglose:

Pensar y reflexionar, ya que han sido momentos de parar, al menos he tenido tiempo para el autoconocimiento, para saber hacia donde vamos, por qué vamos y cómo vamos. Preguntas que nos hacen evolucionar y que hace que nuestro disco duro se engrase y esté preparado para implementar rápidamente. Pensar como acto reflejo, reflexionar sosegadamente.

Nunca tuve tanto tiempo para conjugar estos dos verbos. Para saber cómo puedo (podemos)          avanzar y sobre todo, saber cuáles son las carencias o debilidades a potenciar y cómo trabajarlas.

Stop & Go!!! Parar y pensar, parar y reflexionar, pensar y reflexionar para actuar!!!

«La gente inteligente está llena de dudas, la gente estúpida está llena de certezas» (Bukowski)

 

 

Aprender y desaprender, actualmente los ciclos de aprendizaje son cada vez más cortos, los procesos que usamos van a una velocidad de vértigo y lo que hoy aprendemos en un breve espacio de tiempo estará desfasado. Pero es más importante conjugar el verbo desaprender, ya que siempre que abandonamos una conducta ya interiorizada nos supone un esfuerzo, y precisamente el hueco que tenemos que dejar para lo que queremos aprender tiene que ser grande (salir de la zona de confort, aunque no me gusta nada esta palabrería, sino que debemos hacer esta zona de confort más grande)

Estos dos verbos, aprender y desaprender, van a ser claves para el desarrollo de nuestras competencias y para mejorar nuestro performance. El reseteo debe ser constante, rápido, cambiar de patrones  y de formas de actuar muy rápidamente, incluso creando nuevas dinámicas, nuevas maneras de ver las cosas, de impactar…

También viene muy al hilo de las competencias que se requerirán para nuestro nueva normalidad (flexibilidad, adaptación al cambio, inteligencia emocional, comunicación, resiliencia…). Estas competencias requieren estar moldeándose y evolucionando constantemente y son competencias que desarrollamos, que no nos vienen de serie… Como leí la semana pasada «No eres responsable de las cartas que te han dado, eres responsable de sacar el máximo partido de ellas» (Andy Stalman) 

Aprendiendo, y uso un símil tecnológico, evitamos la obsolescencia programada. No evolucionar, no aprender y no avanzar en nuestro performance (competencias) nos hará obsoletos y totalmente prescindibles. Lo que teníamos y nos valía en nuestro desempeño antes del COVID-19, pasará a mejor vida en cuanto volvamos a la nueva realidad. De ahí la importancia de conjugar en presente estos dos verbos (aprender y desaprender) y sobre todo de invertir en uno mismo, de desarrollarnos, de crecer… y eso es una autorresponsabilidad únicamente nuestra.

 

 

Conectar y compartir, también dos verbos fundamentales en este confinamiento. Aumentar nuestra red de contactos es fundamental, conversar con nuevas personas, empaparse de nuevas visiones, escuchar a personas con una visión totalmente diferente a la nuestra. Vamos a una sociedad hiperconectada (solo hay que ver la cantidad de webinars, de conexiones tipo Zoom, TEAMs… que hemos tenido en este tiempo) y lo positivo es que la famosa sociedad líquida de Zygmunt Bauman coge fuerza y como una profecía se va cumpliendo. El conocimiento está al alcance de todos y hay que compartirlo, no se trata de guardarnos para nosotros lo que sabemos, lo que pensamos… sino de aportarlo, de compartir lo que sabemos, de ponerlo al servicio de los equipos, de los compañeros, de nuestros contactos… Sería, como una metáfora de gestión y management , una redarquía líquida, una manera de que los conocimientos, nuestros conocimientos, no queden circunscritos a un ámbito muy pequeño.

Muchas personas han conectado en este tiempo, han aprovechado para hacer número en su RRSS, pero ¿cuántos han compartido valor?

Ahora más que nunca el conocimiento y la inteligencia colectiva es lo  que va a imponerse. Formas de cooperar, maneras de crecer. Al final compartir es multiplicarse, si competimos nos dividimos, solo hay que ver el número de ganadores de esas operaciones matemáticas.

No se trata de crecer a costa de los demás, sino de crecer con los demás, en equipo. Una nueva forma de ver las cosas. StorySharing puro y duro. Conectar para compartir valor. Y los valores deben ser los pilares en los que se sustente nuestra actividad. Sin valores estamos condenados al fracaso.

Crecer y ver crecer a las personas a tu alrededor, a los equipos debe ser el objetivo fundamental.

 

Vídeo Jarabe de Palo «Eso que tú me das» (YouTube)

 

Eso que tú me das
es mucho más de lo que pido
todo lo que me das
es lo que ahora necesito.
Eso que tú me das
no creo lo tenga merecido
por todo lo que das
te estaré siempre agradecido.
Así que gracias por estar
por tu amistad y tu compañía
eres lo, lo mejor que me ha dado la vida.
Por todo lo que recibí
estar aquí vale la pena
gracias a ti seguí
remando contra la marea.
Con todo lo que recibí
ahora sé que no estoy solo
ahora te tengo a ti
amigo mío mi tesoro.
Así que gracias por estar
por tu amistad y tu compañía
eres lo, lo mejor que me ha dado la vida.
Todo te lo voy a dar
por tu calidad y tu alegría
me ayudaste a remontar
a superarme día a día.
Todo te lo voy a dar
fuiste mi mejor medicina
todo te lo daré
sea lo que sea lo que pidas.
Y eso que tú me das
es mucho más
es mucho más
de lo que nunca te he pedido.

 

Fotos Pexels.com

 

A contracorriente

 

Siempre a contracorriente… Es una particularidad, un distintivo, un hábitat natural. Vivimos tiempos en los que lo normal es ir en grupo, a la sombra, dentro de la seguridad del grupo. Proliferan las modas, las tendencias, el seguir lo que hace la mayoría para intentar abandonar el camino al mínimo atisbo de duda.

Estamos acostumbrados a mirar con recelo, a criticar y a vilipendiar a los que eligen otro camino, a los que escogen otra vía, a los que se alejan de la masa, para (paradójicamente) alabarles cuando logran sus objetivos. Sin darse cuenta que son los que marcan tendencia, los que promueven el cambio, los zapadores que abren nuevas vías, los que marcan la diferencia y los auténticos referentes a seguir.

Son personas que provocan los cambios, que se cuestionan el porqué para entrar luego a fondo en el cómo. Crean nuevos hechos, tienen dudas pero se deciden sin miedo ante las dicotomías que se les presentan en su día a día. No les importan las críticas y saben como inmunizarse ante ellas.

Actitudes, hechos y resultados que hacen que siempre estén en nuestra mente. Pasión por lo que hacen, por lo que creen, ganas de innovar (pasando del pensamiento a la acción)…siempre con ganas de avanzar, sin importarles el resultado… Momentos de acción, momentos de simplicidad, momentos de confianza.

Saben que las cosas hay que hacerlas para saber por qué se han hecho.

Siempre he visto personas así, personas admirables a las que no les importa cómo sople el viento, gente creativa que actúa, que piensa y plasma, que se equivoca y sigue. Siempre a lo suyo, siempre adelante.

Gente que se motiva (automotiva), que ve oportunidades donde los demás solo ven amenazas, personas que se cuestionan a menudo su estatu quo, su buen hacer, sus buenos resultados, sus creencias…

Se trata de pensar, pararse, cuestionarse, de ser inquisitivo con uno mismo y sus limitaciones, se trata de sumar y de colaborar y sobre todo de pasar a la acción.

Son actitudes de crecimiento, actitudes de superación, actitud de escuchar, actitud de asumir críticas, de mirar al frente… actitud de ir contracorriente, de tener retos, de tener objetivos… Actitud de crear y de aportar valor.

Momentos de trabajo, momentos de diferenciarse, momentos creativos…tiempos innovadores.

Son personas con una  hoja de ruta  muy clara, que saben dónde dirigirse y cómo, ven beneficios donde los demás solo ven tiempo perdido.

Gente que trabaja y crea, gente que se diferencia y marca el camino, que siembra sin importarle cuando recogerá el fruto de su actividad…

En esa diferencia está la clave… Diferenciarse aportando valor*… Cada uno tiene que decidir por él mismo, es libre de dirigir la manera de gestionar su actividad, su trabajo, sus objetivos… La oportunidad de autogestionarse, de crecer, de mostrar todo el valor que uno puede aportar en su actividad habitual, de que le conozcan por lo que hace más que por lo que dice…

Definitivamente es infinitamente mejor que te compren por lo que produces, por lo que vales y no por lo que dices que vales. Esa gestión es nuestra y la gestión de la visibilidad debe ser intransferible.

Todos sabemos lo que llevamos en la maleta y es nuestra mano poder mostrarlo…Tenemos las herramientas y usarlas es una cuestión de actitud, de proactividad, de hechos… De no ser uno más y de poder enseñar esa característica tan personal que hace que seas tan diferente de los demás y mostrar ese valor que aportas.

No se trata de algoritmos, se trata de ser uno mismo.

Hedonismo? Individualidad? Vanguardismo? NO, solo trabajo y visión.

*»Si no aportas, no importas» Guillem Recolons (EKHuelva 2018)

Vídeo: El Canto del Loco «A contracorriente»

 

 

 

Valores y Aprendizaje: Simbiosis y Sinergia by @pacomedinapl

Valores y Aprendizaje: Simbiosis y Sinergia by Paco Medina

Simbiocimiento es un vehículo para la reflexión donde se apuesta por el equilibrio, por las simbiosis y sinergias entre las personas.

Gracias a mi compañero Paco Medina por su colaboración…Sinergia total!!!

Cuando Javi me invitó como mentor ejecutivo y amigo a escribir un post en su nuevo blog: Simbiocimiento , me invadió una sensación, primero de orgullo y responsabilidad por la confianza depositada y posteriormente de preocupación ya que aunque he escrito y publicado algún que otro artículo, siempre relacionado con el sector farma , nunca lo he hecho con el carácter “intimista” que Javi me ha sugerido en esta ocasión, para que se alinee con el que Él pretende imprimir en su blog (y dicho sea de paso del que estoy aprendiendo).

 

Me he decidido a escribir una especie de sencillo prólogo sobre su incipiente blog Simbiocimiento, en el que por su presentación y sus post iniciales y muy especialmente por el conocimiento que tengo de la marca personal de Javi, puedo vislumbrar sin miedo a equivocarme demasiado, que trayectoria tendrá.

 

Simbiocimiento, como su nombre ya indica, es un híbrido de valores y actitud positiva, de proactividad, creatividad, generosidad y pasión ante la vida, de una posición abierta a la lectura y a la interacción entre las personas como base del aprendizaje mutuo y del desarrollo personal y profesional

 

 

Simbiocimiento es un foro en el que se aborda el nuevo escenario donde se desarrolla la interacción entre el nuevo perfil del líder empresarial vanguardista y su equipo, donde se comparten valores, fortalezas y habilidades, aportando valor desde un prisma de trabajo en equipo, humildad, paridad, aprendizaje continuo y delegación, contando de manera imprescindible con la actitud franca, abierta y positiva de todos sus componentes como sustrato para que esto sea posible.

 

Simbiocimiento es un vehículo para la reflexión donde se apuesta por el equilibrio, por las simbiosis y sinergias entre las personas en todos los ámbitos de sus vidas y cuyo nuevo dogma del profesional tanto si trabaja por cuenta propia o ajena, tiene como objetivo desarrollar y alinear su marca personal offline, online y empresarial.

 

Simbiocimiento, resumiendo, son: #autoliderazgo #valores #desarrollopersonal #desarrolloprofesional #actitudpositiva #lecturas

 

Simbiocimiento es Javi en estado puro

 

P. D. Además de en su blog javiergalvarez.com  puedes seguir diariamente a Javi en: @javigalvarez
www.linkedin.com/in/javiergalvarez

Francisco Medina Planelles (@pacomedinapl)

 

Foto Shutterstock

 

«Nunca se puede saber
Lo que va a ocurrir mañana
Salvo que al fin de semana
Sigue un lunes otra vez»

Video Radio Futura «A cara o cruz»

 

Perfumes, fragancias y Marca Personal

El perfume que dejamos a nuestro paso, la repercusión de la fragancia que desprendemos en nuestra actividad diaria y la importancia de su alineación con nuestros valores

 

 

Llevaba todas las vacaciones navideñas pensando, preguntándome e intentando plasmar lo que es la Marca Personal para mí.

Tratando de expresar en una palabra lo que en mi opinión condensan esos dos vocablos… Marca Personal, Marca Personal, Marca Personal

Tengo y tenía bastante claro lo que es y lo que era pero me costaba plasmarlo… Huella, palabra, fama, influencia… Al final lo que pienso que más lo define en un solo concepto es el perfume.

La fragancia que dejas cuando te vas, el aroma que dejas cuando no estás, el perfume que desprendes cuando hablas o cuando escribes, cuando te expresas con palabras, cuando gesticulas, el poso que dejan tus actos…

Lo que te hace y te posiciona de una determinada manera… La esencia…

Me encanta la palabra perfume, esa palabra tan sensual, tan relacionada con los sentidos que todos tenemos y disfrutamos.

El aroma que todos dejamos en mayor o menor medida y que está en nuestras manos que sea un recuerdo memorable, perdurable o que por el contrario sea colonia a granel que dura apenas unos segundos.

Presencia en el tiempo, duración, elasticidad, impacto…

Como bien escribía Suskind en su libro El Perfume «En el recuerdo todos los perfumes son imperecederos»

Está en nuestras manos la gestión de esa fragancia y que sea sostenida en el tiempo.

Que nuestra actitud y nuestras acciones tengan un impacto duradero y perdurable en nuestras relaciones y en los lugares en los que estemos y por supuesto que nuestra esencia permanezca cuando faltemos.

Es importante que el aroma que dejemos a nuestro paso se convierta en certeza, que nuestros valores queden plasmados en una esencia que pueda inspirar y servir de ejemplo, que tengamos un perfume que atrape a nuestro paso y nos haga y convierta nuestra presencia en duradera.

Aportando valor con nuestros impactos, con nuestra actividad diaria, creando, sintiendo, diciendo y actuando…

Está claro que se trata de hacer, de expresar, de actuar, de que nuestra impresión no se quede en nuestro fuero interno.

 

 

Hay que mostrar(se) , hay que interaccionar en el día a día, hay que ayudar, hay que preguntar, hay que agradecer, hay que ser para poder estar… Ser expresando, ser aportando, ser sumando.

No limitarnos a ser clónicos sino dar otro paso al frente en nuestras actividades, en nuestras relaciones… Siempre dando/creando/aportando valor.

Coherencia, honradez, honestidad, lealtad … Valores.

Valores que deben ser premisas básicas en la gestión diaria de nuestra Marca Personal. Pero en todo momento, en Redes Sociales, en la calle, en casa, con los amigos… Mundos virtuales y reales 1.0, 2.0, 3.0…

Al final todo ese perfume, toda la fragancia reducida y amplificada por los valores que tenemos.

En palabras de Alexia Herms «Las notas de base son tus valores y el aroma la huella que dejas en los demás»

Valores que delimitan y amplían por partes iguales la gestión de nuestra Marca Personal y nos empujan a ser y no a estar.

Tenemos que irradiar una fragancia que hable de nosotros, que sea reconocible, que nos haga perdurables, que nos convierta en elegibles (Jordi Collell) y nos permita estar cuando nos hayamos ido, que nos haga ser cuando necesitemos estar.

Lograr que en medio de la gente nuestro aroma sea el que se perciba.

Cierro este post con una gran cita de Alfonso Alcántara «Marca es el perfume que usas, reputación el olor que dejas»

Oler, ser, permanecer… Marca Personal

Vídeo Los Secretos  «Gracias por elegirme»